Esta soy yo.


"Un montón de letras que formaron un diario cuando aquellos libritos alguna vez se usaron. Una carpeta repleta archivos guardados en un rincón de computador esperando un lugar expuesto al mundo. Un espacio donde dejar al aire las palabras atrapadas en una mente en constante ebullición. Muchos temas un solo espiritu, el mio."

sábado, 31 de diciembre de 2016

Reflexiones del 2014

Reflexión 1/12 Versión 2014:

Este año, quiso el destino llevarme por sitios nuevos, no planeados para conocer. El Salvador como primer destino y el pueblito de Tenza en las las montañas en Boyaca como el segundo. Dos viajes no planeados con expectativa cero, y que sin embargo, disfrute muchísimo.

En los dos reconocí una tierra bellisima con un pasado ancestral muy fuerte, del que se sienten orgullosos sus habitantes. En las montañas de Boyaca, se me permitió reencontrarme con esos ancestros que llevo en la sangre. Con la sangre campesina de mis abuelos, con la sangre indígena tengo en mi ser. Sangre que no puedo ocultar, que no me interesa desconocer. Porque he aprendido que, entre mas conozca de donde vengo, mejor sera el camino para donde voy. Que orgullo cuando se tiene  un hijo con sangre campesina, indígena, libanesa, paisa e italiana.

Mi libro: un ensayo bellisimo de William Ospina que es casi como un mandato para reconocer nuestro mestizaje y multiculturalidad y que deberíamos leer: "Colombia donde el Verde es de todos los colores".

Reflexión 2/12 Versión 2014:

Mi esposo dice que quiero un mundo ideal. Y mi mundo ideal es aquel donde caben juntas las personas que yo quiero. Reza un refran que de buenas intenciones esta plagado el camino al infierno y muchas veces,  uno termina haciendo caminos espinosos queriendo sembrar rosas o tratando de unir los pedazos rotos de amistades vencidas.

Este año tratando de hacer malabares para volver a tener ese mundo ideal, descubrí que se necesita mas que pegante y buenas intenciones para unir pedazos rotos. Que estos solo se restauran por la gracia del perdón y que ese milagro solo viene del cielo.

Mi libro recomendado: "El hombre en busca del sentido" de Vicktor Frank, porque a veces los pequeños detalles que agobian nuestra vida, pierden importancia cuando se conocen historias donde fueron perdonadas las rencillas generadas por un pan, agua o por mantener un techo, o la vida misma.

Reflexion 3/12 Versión 2014:

Este año fue especialmente frustrante en el segundo semestre. Situaciones  diarias hicieron que el año se tornara difícil y que ansiara con fe que este día llegara y se llevara rápidamente las frustraciones y esas eternas noches sin dormir. Cuando los días son duros y especialmente largos, parecen un intenso verano donde se ruega por un poco de lluvia que calme el calor. Este duro semestre me enseño a que la vida es simplemente un juego de video. Si no pasas de nivel, te quedas anclado en ese repitiendo y repitiendo hasta que encuentras la forma de salir del mismo, y entonces mientras en la pantalla, te sale un GAME OVER, vuelves y lo intentas con menos o más recursos, y el revés en el juego se hace mayor, de pronto comprendes que algo debe cambiar, no en el juego (que siempre será el mismo), en ti, para que finalmente encuentres el camino que te lleve a un nivel diferente.

Este año, encontré que los cambios debo generarlos en mi porque el juego de la vida tiene la misma programación, quien debe pensar en como pasar cada reto soy yo.

Mi recomendado es la película “Al filo del Mañana: Vive, Muere, Repite” con Tom Cruise, basado en el libro de ciencia ficción All you need is kill de Hiroshi Sakurazaka, quien encarna a un oficial que tiene la capacidad de repetir su ultimo día con vida y se ve obligado a cambiar de estrategia si quiere cambiar el curso de su historia.

Reflexión 4/12 Versión 2014:

En mayo una mala caída hizo que mi suegra tuviera fractura de cadera y pasáramos momentos muy difíciles con su convalecencia y su recuperación. Gracias a la oportuna atención, a un excelente cirujano y la gente que nos apoyó, ella salio adelante con una rapidez sorprendente y ahora disfruta de una movilidad al 99%.

Ese momento difícil en el que alcanzamos a pensar en lo peor, nos permitió comprender la importancia de la gratitud, de agradecer por cada día que respiramos, por estar rodeados de los seres queridos que tenemos, por las personas que nos apoyaron cuando mas los necesitamos y sin esperar nada a Cambio.

Mi libro recomendado es The Magic The Secret, de Rhonda Byrne, un aporte de mi hijo a las reflexiones del día, en la que la gratitud es la palabra mágica que abre caminos.

Reflexion 6/12 versión 2014:

Tengo una mesa. Es una mesa permanente que esta ubicada en un rincon de un restaurante. Esa mesa es ocupada por lo menos el 90% del año. En esa mesa por lo menos siempre hay dos. En esa mesa se discute, se rie, se llora. En esa mesa recibimos buenas noticias. También malas noticias. En esa mesa comemos buenas comidas. Comidas cuando estamos a dieta, cuando estamos en plan de engorde, cuando estamos euforicos o cuando queremos que un buen plato ahogue una pena.

Esa mesa encontramos el sentido de una buena comida: comerla alrededor de gente querida, gesticulando, apreciando nuestro tiempo de comer, como se respeta el tiempo de amar y de rezar. 

Mi libro "comer, amar,  rezar" cuya adaptacion al cine protagoniza mi amada Julia Roberts. Una pelicula que habla sobre la amistad, sobre el profundo significado de comer con la gente correcta en el momento correcto, justo como pasan mis dias en esa mesa.

Reflexion 7/12version 2014:

Hace 2 años no habiamos podido reunirnos porque la ausencia permanente de una de las integrantes de la familia politica era demasiado dolorosa. Dolia pensarla, dolia hablar de ella, dolia sentirla. Hace dos años habiamos tenido la ultima navidad con ella. Dolia demasiado. El tiempo que todo lo cura ha podido sanar en algo la herida. Ha logrado reunirnos de nuevo en torno a su recuerdo, en torno a lo que mas se precia en estas fechas: la familia.

Mi libro "La emocion de las cosas" de angeles Mastreta, un relato autobiografico sobre la familia.

Reflexiones 2013

Mis doce reflexiones del ano: a 13 horas de cerrar para siempre el 2013, inicio el análisis reflexivo en publico sobre el balance de estos 365.

1. La muerte nos ronda cada segundo de nuestra vida. Este ano toco mis fibras profundas con la temprana partida de seres q quise con todo el corazon.  Doloroso ejemplo para aprender a siempre tratar a todos y vivir los días como si fuera la ultima vez que disfrutaras de su presencia.

Reflexión 2 /2013: vas por el mundo dando consejos a todos esperando que por el poder de la palabra todos te hagan caso.

He aprendido a decir lo q pienso sin esperar  aprobación de todos. Basta con sembrar la duda q instigue a pensar. Con eso basta y que la verdad sea encontrada por cada uno.

Reflexion 3/2013:

Decidimos un viaje lejano a conocer familia q no veíamos hace mil anos y que yo, por lo menos no conocia. Fue un descubrimiento maravilloso  encontrar, que a pesar del tiempo y la distancia, el sentimiento q nos une supera barreras de idioma y de generación. La sangre llama, y familia es familia, así sea la primera vez que la saludas.

Reflexión 4/2013:

Había una vez un pelao q se mudo al otro extremo del país y conoció una niña de la q se enamoro profundamente y se casaron. Antes fueron juntos a la escuela de negocios, porque era la carrera del futuro. Ella después decidió q lo suyo era ser maestra, el siguió en el mundo de los negocios. Un día los conocí y los dos eran maestros.

Cuando pregunte como termino siendo maestro su respuesta pagó mi viaje. "Simplemente no tenia tiempo para mi familia. Cambie dinero por tiempo en familia."

Lecciones aprendidas

Reflexión 5/2013:

La unica forma como se valoran todos los anos de trabajo desinteresado de  los padres,  cuando uno pasa de la adolescencia a la adultez y es cuando comienzas a saber los rigores de tener un adolescente en casa. En ese instante se comienza a preguntar una  como se hizo para llegar sano y salvo a esta etapa de la vida.

Reflexion 6/2013:
si quieres probar quienes son tus verdaderos amigos,organiza con ellos una fiesta de 25 anos y trata  de sobrevivir a ella. Solo puedes hacer eso con los que crecieron contigo y pueden soportarlo todo. Porque ellos lo vivieron todo junto a ti.

Reflexion 7/2013:

el tamaño de la familia es q el Dios te da para cumplir con Su propósito divino. No pidas mas o menos de lo que tienes porque lo q te da el creador es la.justa medida de lo que necesitas.
Doy  gracias a Dios  por mi familia chica pero completica

Reflexión 8/2013:

Mi historia de amor preferida fue la de "love story". Tragica y bella. Los grandes amores se alimentan de tragedia, celos,desgracias.

Mi historia de amor se alimenta de brazos grandes que me abrazan cuando estoy triste, preparan alimentos deliciosos, me escucha y me acolita las locuras q emprendo. Mi gran amor vive conmigo y  le da paz y amor  a mi vida.

Reflexión 9/2013

Los amigos son aquellos q tu escoges para q te acompañen x el camino de la vida. Eventualmente llegas a adoptarlos en fechas especiales cuando el estar juntos se hace indispensable.

Reflexiones del 2011

Tengo una amiga q lleva varias noches desvelada. Tiene 9 meses de embarazo y lo único q espera es la llegada de su primera hija. La espera con ansias, con deseos, con amor y con una gran expectativa.
Mi amiga me recuerda lo q hoy  siento. Hoy termina el 2011 y la tierra comenzó a parir el próximo año. Como habitante de esta tierra, lo espero con ansias, con deseos por cumplir, con esperanza de q este sea un año mejor.

Reviso mis deseos del 2011 y veo tantos cumplidos, pero también varios q no se llevaron a cabo. Mi decepción inicial me lleva a la frase "pide y se os dará". Pero yo pedí, y no me diste todo. E inmediatamente una voz interior me recuerda, que solo tengo autoridad para el QUE. El COMO y el CUANDO, no me pertenecen, no son míos. Debo seguir aguardando.

Sentí dolor por la partida de familiares de mis amigos. Sentí su dolor y fue mi dolor. He comprendido este año, que la muerte es un cambio de vestuario. Nuestra alma es eterna, nuestra vida es una fiesta y la muerte es solo un cambio de ropaje para una fiesta posterior. Asimilar esa lección me cuesta pero estoy dispuesta a aprenderla. Tengo el 2012 para seguir aprendiendo.

Del tren de mi vida se bajaron personas pero subieron otras. No siento dolor ni pena; la vida es un eterno viaje y siempre, en algún momento se vuelven a subir a mi tren, en la estación donde menos lo espere. Paciencia otra tarea por cumplir.

Doy gracias por mi familia, por todos los sobrinos q tengo, por el hijo maravilloso q me diste. He comprendido q tengo una gran tarea con ese tesoro q tengo en mi vida y que las fuerzas y la dedicación debe ser para él. He comprendido q las familias pueden ser de dos, tres, o mas. Que la vida me dio un hijo y muchos sobrinos. Y que los sobrinos son casi hijos y q los sobrinos igual enseñan el sentido de la paciencia.

Doy gracias por mi vida. No quiero otra. Doy gracias por los amigos q volví a encontrar gracias a la tecnología y solo pido q no sea la tecnología la q los vuelva a alejar.

Pido amor para el otro año, pido amor para mi vida y para la de todos los q me rodean. Pido amor para el mundo, porque solo el amor nos hará sobrevivir ante la adversidad.

Soy Pamela Cruz escribiendo desde mi Blackberry, el ultimo dia del mes de diciembre del dos mil once, cuando evaluo todo lo bueno q me trajo este año hoy termina.

jueves, 29 de diciembre de 2016

Aprendizajes del 2012

De lo q he aprendido este ano: el verdadero despertar sucede cuando te das cuenta q eres creador, y en ti esta toda la capacidad del mundo para ser feliz, para aprender y evolucionar a partir de la aceptación de tus cualidades y de las oportunidades de crecimiento. Todo esta en mi. Crecer como persona, depende únicamente de mi decisión.

De lo q he aprendido este año 2: que el amor es el motor que debe impulsar cada uno de los actos que hacemos a cada instante. Q el amor todo lo da, todo soporta, todo lo entrega. Que  el amor no se entrega solo a los q te aprecian. Sino también a los q no te quieren, a aquellos que nos han hecho daño.

De lo que he aprendido este año 3:  El universo te pone en aprietos, pone a prueba tu capacidad creadora de soluciones, tu capacidad para superar retos. Y ante el desafío no hay opciones. Solo te queda  enfrentarlas completamente por  odiosas, dolorosas, o estúpidas q parezcan. Son como los niveles de los juegos de vídeo. Solo superan los niveles quienes lo juega y lo ganan. No importa el tiempo, solo superarlo.
De lo q he aprendido este año 4: Nuestro cuerpo es energía y la energía transmite su vibración, buena o mala a su alrededor. Por eso no me extraña cuando siento personas con "mala vibra" y que sin quererlo descomponen el ambiente alrededor. Y cuando yo he estado con mala vibra, todo se altera y no fluye. Pido perdón cuando mis malas vibras afectaron a quienes comparten su espacio conmigo.

De lo q he aprendido este año 5: El ropaje q tenemos solo nos sirve para tener una apariencia mientras transitamos por este mundo. El uso q hagamos del ropaje, hará mas o menos agotador el camino. Heme aqui de 40 años, 4 décadas gozando de mi ropaje, de mi buena vida.  Siento q estoy en la cima del mundo, aunque mientras descanso, aun sigo sin ver el resto del camino que aun falta x recorrer. El sol calienta mi cara

.De lo q he aprendido este año 6: No sirve el esfuerzo si no terminas lo q te propones. Cuando la vida te pone un reto el deber es cumplirlo. Eso pensaba aquellas interminables noches cuando sentía q tiraría la toalla, porque el proyecto de grado no tenia fin. Pero la fuerza interior siempre triunfa. Sale del apoyo de tu familia, de tus amigos, de los apoyos morales q te llegan a reforzar tu espíritu. Gracias a todos

De lo que he aprendido este año 11: somos una fuente inagotable de conocimiento. Lo podríamos llegar a ser, si solo nos tomáramos el trabajo de quitarnos la arrogancia de sabios, despojarnos del orgullo, desaprender lo aprendido, y escuchar nuevas teorias, nuevas formas de hacer, nuevas formas de pensar. Vaciar el cantaro y llenarlo de cosas nuevas.

De lo q he aprendido este año 12: 
La gente a tu alrededor no te rodea por casualidad. Tiene una misión contigo como uno la tiene con ellos. Descubrir la misión y el papel de cada uno puede ser una verdadera tortura, pero una vez encontrado el sentido, vaya q si se vuelve agradable su compañía.

martes, 29 de noviembre de 2016

Como si fuera el último día

En el mes de abril, por viaje de negocios me monté en una avioneta de esas de 30 pasajeros o menos. Ya he mencionado mi miedo a volar, y mis estrategias para soportar el vuelo. En esa ocasión yo iba en última fila y a mi compañero a mi lado, justo antes de comenzar el carretaje, recibió una llamada que lo disparó de la silla como un loco hacia la puerta de salida. Habló con la Auxiliar de Vuelo y detuvieron la nave. Desde mi silla veía como el hombre esperaba su equipaje y luego corría a toda velocidad hacia la salida. Luego, cuando aterrizamos, nos enteramos que su hija se habia caído y fracturado el brazo. Mas tarde en casa contando la anécdota, confesé nerviosa que mi primer pensamiento cuando el hombre bajó de la avioneta fue bajarme con él. Y el segundo fue el titular que ocuparía la primera plana si mi aeronave se estrellaba: "El único sobreviviente, bajó en el último minuto".

Esta mañana mi hijo me despertó con la noticia del siniestro del avión de los futbolistas. En lo primero que pensé fue en la semana anterior, en el vuelo que tuvo mi hijo y 52 más junto con los entrenadores a los juegos binacionales de colegios en Manizales, en la zozobra vivida en silencio y en el "Gracias a Dios" que sentimos todos cuando el avion tocó tierra, en la ida y en el regreso.

En acontecimientos tristes como este que vive el futbol del mundo hoy, aparecen los milagros del que no se subió porque llego tarde, o el que se lesionó, o el que dejo el pasaporte, o el que sobrevivió simplemente porque no le tocaba.Salir de casa y volver a salvo, en bus, en bicicleta, a pie, en carro o en avión, es un milagro diario. Un regalo que la mayoría damos por sentado y que no apreciamos como deberíamos porque ninguno tenemos claro cual será nuestro último día.

Soy Pamela Cruz, escribiendo hoy 29 de noviembre 2016 para todos aquellos que damos por sentado que el tiempo nuestro en la tierra no tiene fecha de expiración.

miércoles, 23 de noviembre de 2016

El maravilloso silencio de la música del corazón

Esta noche me ha tocado trabajar. Tenía tiempo que no me quedaba hasta la madrugada tecleando en el computador. No es igual la noche a los 44 años que a los 29 cuando no me importaba trasnochar montando pedidos de temporada escolar. Esta noche sin embargo, tocó. Al azar seleccioné un concierto de música clásica. De esa que me inundaba los oídos cuando estudiaba en la U. 

Me he transportado a las noches aquellas donde estaba sola, con una cantidad de pensamientos haciendo de las suyas en mi cabeza. Esas noches de universidad, donde mucho es confusión, bulla y desazón. Algunas de mis noches eran así. Sobre todo cuando estaba en exámenes finales, cada semestre. En esa época salían colecciones de discos de música clásica que se compraban casi a huevo. De hecho yo, humilde universitaria, dependiente de una modesta mesada, ahorraba con el celo propio de quien quiere adquirir el tesoro de su vida y logré hacerme a una interesante colección de CD's de música clásica. En esa época, sin ser una erudita, me di a la tarea de entregarme a la libre escucha y descubrí que ese era el silencio de los que nos negamos a entregarnos a una mente en calma. Lo sé ahora. Mientras escucho las teclas de un piano interpretando "Para Elisa" de Bethoven. Recuerdo como mi mente solo se concentraba, escuchaba, escuchaba y de repente, un sentimiento se apoderaba de mí desde el centro de mi pecho, justo como lo siento ahora, mientras escribo. Hoy, muchos años después, comprendo que esa música poderosa, acallaba mi mente y creaba- aún la crea- una conexión increíble con el corazón. Comprendo hoy que, por muchos siglos que hayan pasado desde que su composición, esa música convierte pensamientos en sentimientos, sosegando cualquier angustia existente.

Soy Pamela Cruz escribiendo hoy 23 de noviembre/2016, en esta noche clásica, desde la más sublime calma, esa que llega como cuando de repente, se posa un pajarito, cantando frente a ti, y ruegas porque ese instante no termine nunca. 




viernes, 11 de noviembre de 2016

La memoria del Cura

Hace poco menos de 10 años, en mi primer viaje a México, conocí a una Mexicana con acento Argentino. Ella, en un día soleado mientras caminábamos juntas por las calles de la bellísima  Morelia, me contó su historia. Llegó de Argentina hacía algunas décadas siendo muy joven, escapando de las garras de la dictadura. Atrás había dejado a su familia, a un hermano muerto y había huido en un carro viejo,  a escondidas, dejando una vida para inventarse otra. Recuerdo aún la triste sensación que me produjo su historia. Ella, una mujer mucho mayor que yo, pero con un espíritu muy joven, sobreviviendo a la muerte. México la acogió y la cuidó, al punto que ella no sabe a que país ama más.

Hace un par de meses conocí una venezolana que salió literalmente corriendo de un país donde el trabajo escasea y,  embarazada de su esposo colombiano dejó su tierra, su comida y su familia porque su vida allí era insostenible. Ellos se habían conocido en el vecino país hasta que la política de Chavez lo destruyó todo.

El año pasado conocí a un cubano que había huido de su isla cuando era un adolescente. Hasta hace unos meses había podido reunirse con su hijo luego de sacarlo, con mucho esfuerzo y dinero, de la Cuba de Fidel.

Yo misma soy fruto del desplazamiento de mis padres, y ellos de los suyos a causa de una violencia. Sus historias de huida en medio de la noche, corriendo por sus vidas, siendo aún niños, parecen fantasía.

Hace un par de meses, un amigo me comentaba sobre la oleada de venezolanos en Colombia, quejándose de las oportunidades que nos "robaban" a los colombianos. Recordé aquel sentimiento extraño que sentí la primera vez que conocí a una trabajadora venezolana en Colombia. Sentí que nos estaban invadiendo. Luego de unos minutos, y después de escuchar todo lo que vivió en su país y la tristeza con la que se desprendió de aquella Venezuela que amaba y decidió abandonarlo todo, sentí un profundo dolor. Ella, sentada en mi escritorio sólo quería sentirse segura, tener comida todos los días, no ser agredida. Y nosotros, en medio de nuestro propios problemas, habíamos sido capaces de ofrecerle refugio.

Este país ha recibido judíos, españoles, árabes, chilenos, alemanes, italianos, argentinos, chinos, japoneses que llegaron en busca de paz, desde confines de la tierra afectados por guerras, conflictos o recesiones. De la misma forma, el mundo le ha abierto las puertas a todos los valientes que han huido de alguno de los 50 años de nuestra historia de sangre y violencia. Ellos también fueron inmigrantes legales o ilegales y lograron crear un espacio en el país que los acogió. Todos, incluso los expatriados voluntariamente, viven con una nostalgia de tierra que tratan de sobrellevar con detalles que a nosotros nos parecen cursis. (Hamacas, artesanías que jamas veríamos en nuestra sala nosotros los que vivimos en Colombia). Procuran mantener sus costumbres en la lengua, en la comida o en sus tradiciones en un esfuerzo supremo por no olvidar, en aquellas tierras, lo más sagrado que tenemos como seres humanos, las raíces.

Soy Pamela Cruz, hoy 12 de noviembre 2016, escribiendo para todos aquellos curas que olvidaron que alguna vez fueron sacristanes. A todos los que ahora se sienten amenazados por la siguiente ola de compatriotas y dan la espalda a esos que, como ellos, sólo buscan un lugar seguro en el mundo.























Imagen: Cortesia de e-faro

viernes, 21 de octubre de 2016

Mi compañero de mesa

Estoy de regreso a Barranquilla. Desde el martes emprendí mi visita a La Ciudad Hermosa, como he escuchado nombrar a la ciudad de la familia de mi amiga Damaris. Ella gentilmente me advirtió dos cosas: que fuera con repelente y que me iba a gustar. Se equivoco en lo primero, no en lo segundo. No me picó ni un mosquito y Monteria es una ciudad preciosa.

La noche de mi llegada me llevó un taxista al hotel. El recorrido fue, no por la via principal, sino por barrios y urbanizaciones nuevas, solo para presumir del desarrollo de su ciudad.

- No es esto una maravilla? Casas en medio del monte. Allá, en la esquina, ordeñan.
- ordeñan?- le dije. Qué ordeñan? - Pue vacas, doña. Es que Monteria viene de monte. Y aqui el monte nos rodea. - respondió orgulloso.

Durante los dos dias que estuve no tuve tiempo de conocer nada. Llegaba al hotel de noche sin ganas ni tiempo para salir. Pero hoy, antes de regresar, pedí a un taxista de confianza que me recomendaron que fuera mi guía turístico. Asi conocí a Pedro*.

El itinerario era comprar el infaltable suero atoyabuey, queso bollos etc, recorrer lo que más pudiera y almorzar antes de 1 pm, hora a la que debía estar en la terminal de transporte de Monteria. Durante la mañana sentí el profundo aprecio y respeto al alcalde actual.  Me recorrio el camino al rio, el parque lineal, que llevan construyendo hace mas de 8 años, cuando inicio la administración. Me mostró un puente que une el margen izquierdo con el derecho y descongestionó la comunicación entre lados del río, que increíblemente tuvo por 80 años un solo puente de cable. El típico planchón, donde cruzan gente de un lado al otro, el mirador del rio, el centro. Las ciclovias. Las iguanas. De camino a la teminal pasamos por un restaurante de carnes que me recomendaron y el churrasco prohibido de comer, y sin embargo imperativo de comer tenia 500 gr, porcion que jamás me comería sola. Decidí invitarlo a comer. Compartiría el almuerzo con mi guía turistico. 40 años pensionado del ejercito 3 hijos. Trabajo en explosivos y sus heridas de guerra las cuenta con tristeza. Mientras comíamos, él  hablaba y yo escuchaba. Comenzó a llover. Tiene una esquirla de granada clavada en la cabeza, recuerdo de una explosion que casi lo mata. 45 dias estuvo en UCI esperando que se deshinchara el cerebro. De aquello le quedó como recuerdo un dolor punzante que se alborota cuando llueve, cuando cae un rayo, y según cuenta, cuando la luna está llena. No quiere que sus hijos sepan que fue militar. No por ahora. Teme las preguntas que no pueda responder. Trabaja hasta las 6 pm y no se mata por plata. Cuando se ha estado tan cerca de la muerte, eso ya no importa. Le pregunté si había visto morir a sus amigos, (pregunta estupida lo sé), y me contó que cuando estaban los cilindros bombas cayó uno cerca a su escuadrón y uno de sus compañeros voló en pedazos. Uno quedó mal herido. "Pero como hace,  uno si en esos momentos tiene que luchar por su vida".  Mi compañero de mesa tiene 4 años menos que yo y habla como un anciano de 70. Lo vio todo. Me preguntó si habia votado por el No. "Tiene cara de No", me dijo. En dias tan radicales ya me da miedo decir por qué vote. Le dije que habia votado por el Si. Me dijo: "yo tambien. La gente no quiere a la guerrilla pero doña, el que no ha vivido la guerra, no sabe lo que es tenerla. Yo estuve. Gracias a Dios siempre desactivé las bombas pero eso no se deseo nadie. Yo me fui al ejercito a los 16 porque en mi casa los papás no eran como ahora. Era duro. Pero ahora que tengo a mis hijos, no los dejaría por nada del mundo."

Soy Pamela Cruz escribiendo hoy 21 de octubre de 2016, desde el autobus Premium de Expreso Brasilia en mi primer viaje a la tierra del porro, del sombrero vueltiao,  del rio que une, del hablado golpeado, rematando un viaje con una historia de esas que me acerca a realidades inimaginables.

* El nombre de Pedro ha sido cambiado porque ajá... uno no sabe!!!


viernes, 14 de octubre de 2016

El profesor de historia

Era séptimo grado, año 1985. En ese año entraron al colegio Miguel Dada y Paola Maury. Mi salón quedaba muy mal ubicado. Justo arriba del Salón de Profesores. Ese año comenzaba un poco la libertad. Esa que nos servía para salir a casas de amigos, irnos caminando hasta la casa en combetes de 5 o más. Ese año, por cuenta de una disposición extraña, yo una de las mas bajitas del salón, quedé casi en una esquina posterior del mismo. Odiaba mi ubicación porque atrás hacía mucho ruido. Los desordenados se alborotaban y me costaba mucho concentrarme. No obstante, había una clase que una vez iniciada, nos sumía en un silencio absoluto. El profe entraba caminando rápido, como si lo persiguiera el tiempo. Comenzaba de inmediato y, desde ese instante, el salon enmudecia. Era un contador de historias. Aún recuerdo mi cuaderno impecable de negro y márgenes rojos escrito con mucha exactitud. Jamás estudié más alla de releer lo que él contaba. No hacía falta. Durante los 40 minutos de la clase, todos habiamos viajado por breves instantes al pasado. En una aventura que sólo supo contarnos quien con su pasión respiraba, transpiraba y a su paso nos inspiraba.

Salí del colegio y nunca más volví a verlo. Me averguenza escribir sobre alguien que ha muerto sin haber recibido mis agradecimientos por su huella en mi. Aunque creo que en mas de una ocasión lo deje escrito en ni blog. Me enorgullece haber pasado por su clase. Fue un honor,  un placer y una verdadera fortuna. Se fue un grande. Un inspirador de jovenes. Un amante de la docencia. De esa docencia que transporta y que convierte la escuela en una aventura. Esa docencia que te deja una nuestra para que tu mismo te comas el mundo.
Paz en tu tumba profesor Braulio Teheran. Estaré eternamente agradecida.

Soy Pamela Cruz escribiendo  hoy 15 de octubre, noche de sábado, mientras atesoro ese año especial de mi vida cuando la historia fue contada de una manera distinta.

domingo, 2 de octubre de 2016

Simplemente no soy nadie

Este Matthew nos ha tenido enclaustrados desde ayer sábado a las 2pm. Por cuenta de un cielo totalmente nublado, una lluvia intermitente, sin tormentas, sin relampagos. Como si necesitaramos de un largo baño y de un fondo musical distinto al que hemos escuchado todos estos días largos y pesados. De alguna manera, Dios le hizo un tremendo favor a la Costa. Hizo llover de una forma tan vehemente que prácticamente nos tiene en casa, escuchándolos unos a otros.

En este último mes, el menos afortunado del año para mi, tuve varias bajas en el frente. Dos amigas menos por culpa de un malentendido que nadie quiere aclarar, exiliada de 2 chat de los que preferí retirarme porque perdieron su foco y perspectiva, una muy reducida celebración de amor y amistad por temor a que el único tema del momento monopolice la noche, reuniones de familia divididas por un asunto que se volvió político. A veces, en mis noches largas, me cuestiono si mi decisión vale la pena ese camino espinoso.

Esta semana, tuve varias salidas, de esas que nos obligan a escuchar varias versiones de lo mismo.

-Estuve con el hijo de un coronel retirado que no sabe si votar SI o NO. Contrario a lo que yo pensaba, su padre tiene el voto por el SI definido hace mucho tiempo. El combatió muchos años y dice que ya está bueno de muertos. Su hijo cambio se debate entre la justicia y seguir adelante.

- Conocí a una persona cuya familia está dividida. Sus hermanas votarán NO mientras ella votará SI. Vivió en zona de guerrilla y en su niñez y adolescencia conoció la incertidumbre de no volver a ver a sus amigos. Uno de sus hermanos, un Ex Uribista acérrimo, por su trabajo, ha tenido que hablar con campesinos que fueron obligados a cultivar coca y que solo esperan este domingo para sembrar lo que toda la vida quisieron, cultivos que les den de comer. El cambió su voto por el SI.

- Ayer a medio día, paramos a comernos una arepa con huevo. Con muchísima rabia vi un panfleto que combinaba firma del acuerdo con aborto.  Me provocó romperlos todos, pero me contuve. El que me atendía me miró fijamente  y luego me dijo. "Sabemos que el SI va a ganar a pesar de estas cosas. Y yo lo quiero. En Tucurinca hubo una masacre con 17 muertos. Había niños. Si los familiares de ellos van a votar SI, por que yo tendría que votar NO?"

- Anoche me llegó un video vilmente editado sobre un sacerdote que decía que Dios era justo y que si no habia justicia, no aprobaría cualquier acuerdo. Un video de 1:45 minutos que forma parte de un sermón de 100 minutos, donde se habla de perdón. Me dí a la tarea de escuchar el sermón completo para encontrar esa frase que sentencia el desacuerdo de Dios con la injusticia. Y me encontré con los 100 minutos más maravillosos de esta larga,  pesada y agotadora semana. Mi voto simplemente es SI. Si Dios, con lo terriblemente pecadores que fuimos, somos y seremos entregó a su hijo para lavar nuestros pecados y en su infinita misericodia sigue abriéndonos un espacio de perdón a nuestros imperfectos y pecadores corazones, no soy nadie para no aceptar que el conflicto se termine, que esos pecadores que nos hicieron tan infelices tengan su segunda oportunidad en la tierra y de paso truncar un posible futuro menos doloroso que el vivido durante estos 52 años de conflicto. Simplemente, no soy nadie.

Soy Pamela Cruz, escribiendo hoy 2 de octubre preparándome para votar convencida hasta el tuetano por el SI, a pesar de la lluvia. Porque todos merecemos una segunda oportunidad sobre la tierra. Dios nos ha dado muchas, no somos dignos de hacer menos que eso.

PD: en el minuto 21 el sacerdote hace una premonición 10 años antes de este momento histórico sobre un eventual acuerdo de paz con las Farc. Escuchen lo que dice y ojalá disfruten de unas palabras bellisimas inspiradas por Dios.

https://m.youtube.com/watch?feature=share&v=72VrfbTGuI8

domingo, 18 de septiembre de 2016

Las palabras mágicas

Ya he contado que yo fui la hija más dificil de mis padres. Y eso me convertía en la usuaria más frecuente de la correa, la mano y las chancletas de mi casa.

Con todo y eso, yo aprendí a decir "Lo siento" con gran velocidad. Luego del castigo, me quedaba pensando si fue justo o no, y si efectivamente había sido merecedora absoluta de la correa. Cuando yo en mi interior creia que sí, me disculpaba. Mi mamá me decia que me disculpaba mucho. Demasiado para su gusto. Es posible que haya sido verdad. Pero eso me enseñó el poder de decir Lo siento. Dos palabras que pueden arreglar cualquier mal entendido y que sin embargo, en esta sociedad son símbolo de flaqueza. Durante mucho tiempo, inclusive en el colegio,  cuando una se peleaba un dia si y otro también, mantuve esa costumbre, sólo si me correspondía darlas. Muchas veces esperé la misma entereza de quien la embarraba conmigo pero pocas veces pasó. Es tan dificil reconocer el error que es mejor terminar una relacion antes de demostrar debilidad. Así pasa a veces. Con todo. Con los amigos. Con los padres. Con los hermanos. Con la familia. Y a veces prefieres morirte sin volver a saber de alguien solo para no tener que musitar aquella frase dificil pero mágica y liberadora.

Creo que por eso es tan dificil para la mayoría imaginar un postconflicto, porque se necesita ser valiente y decir con el corazón en la mano: Fui yo y lo siento de corazón. Y dejar en las manos del agraviado el perdón. Por lo menos en mi caso, sólo llamar y pedir perdón me ha liberado de la culpa. Allá del otro si lo acepta o no. Ese es asunto suyo, entre él/ella y su consciencia.

Soy Pamela Cruz escribiendo hoy 18 de septiembre reflexionando sobre lo dificil que es para algunos dar la cara y terminar un asunto, usando tan solo 2 palabras.

sábado, 17 de septiembre de 2016

Se llamaba Maria

Cada 17 de septiembre es el día mas largo del año. Comienza desde las 11 pm del día anterior la invasión de recuerdos, antes atropellados, ahora más mesurados del día de su partida. He escrito sobre su muerte desde hace 6 años, cada 17 de septiembre. Pero no he escrito sobre su vida.

Tenía forma de abuela. Con un cuerpo abultado por una hernia que nunca se quiso operar. Vivió conmigo desde los cero dias de nacida hasta los 20 años. Se fue muy pronto pero mi abuela tenía 80 años cuando murio. Hubiera querido que viviera más, como mis amigos que tienen a las suyas vivas con más de 90. Confieso q me da envidia. Mucha envidia.

Ella nació en el campo. Un 24 de julio de 1912. Era Leo. Noble, valiente y humilde. Sabía defendernos de quién nos quisiera hacer daño. Tenía varios hermanos. Mis bisabuelos llegaron viudos a ese matrimonio y cada uno llego con sus propios hijos e hicieron más. En esa época los niños morían mucho y era mejor asegurar la descendencia. Su hermana preferida era Margarita. Se parecían tanto que más de una vez las confundieron nuestros vecinos. Mi abuela se casó joven con mi abuelo Gentil. Era alto,  buen mozo y un gran guitarrista. La conquistó tocando tiple,  a la antigua. Cuando decidieron casarse, la suegra la invitó a su casa para enseñarle a cocinar como le gustaba a su futuro esposo. Tuvieron varios hijos pero la muerte se los llevó. En esa época tomaban fotos de los muertos para recordarlos, antes de enterrarlos. De sus hijos sólo sobrevivieron mi tio el mayor y mi madre, la menor de todos. Su esposo, mi abuelo, murió muy joven,  de neumonia. Quedó ella sola con dos hijos, una finca y muchas responsabilidades por delante. Comenzó la violencia y se ensañó con mi abuela. Fue obligada a salir de sus tierras con dos hijos y lo que les cabía en una carreta. Mi madre y mi tio trabajaron desde muy chicos para ayudar en la casa. 

Ella vivió con nosotras siempre. Adriana era su preferida. Mi hermana la adoraba. Ella fue su soporte siempre. La consentía, la consolaba, la abrazaba. Se levantaba de primero y se acostaba de ultimo. Recorría la casa al final para constatar que todos estabamos en nuestro nido.  Hacia colaciones y las comíamos de merienda. Era su forma de consentirnos. Ella decia que no tenia nada. Pero lo tenia todo. Decía que sus pertenencias le cabian en una bolsa. No mentía. Ella era adusta en sus lujos. Un par de aretes, un anillo que guardaba y una cadena. Entre sus caja de recuerdos tenía una tarjeta ajada,  vieja, amarilla, escrita con pluma sepia y ortografia perfecta. Una carta que mi abuelo le escribió donde le declaraba su amor. Soñé siempre con alguien que escribiera así. Como el hombre que le hizo esa carta y que nunca conocí.

Hacía un delicioso café que mi papá amaba. El era el primero en la fila de comer. Ella decía que mi papá era el mejor yerno que le había dado la vida. A mi padre solo lo vi llorar con las muertes de mis dos abuelas. Mi abuela lo había adoptado cuando se casó con mi mamá. Ella siempre le dijo Jaime y lo trataba de usted. El siempre le dijo Sra Maria.

Yo era la rebelde de la casa y tambien la que mas regaños recibía. Mi abuela me decía que me quedara quieta. Que no respondiera. Que esperara a que se calmaran las cosas. Yo no le hacia caso. Me contaba una y otra vez que a su hermana por respondona siempre la castigaban y que quería que yo no me pareciera a ella. Que fuera mas humilde y aceptara los regaños. Asi, porque si.

Cuando no le haciamos caso amenazaba con irse. En más de una ocasion empacó determinada a dejarnos, nosotras llorabamos y prometiamos que ibamos a cambiar. Y ella se quedaba.

Convertía cada lata vacia, cada jardinera desocupada en una huerta. En el patio había papayas. Tómates. Yuca,  platanos, limones, guayabas, ajíes, maiz, guanábana. Amaba los pajaritos y ella misma los alimentaba. Cada mañana con paciencia, con amor. Le recordaba su finca, creo. 

Oraba cada noche y nos rezaba el rosario. Nos obligaba a ir en mayo de casa en casa rezando el rosario con sus amigas. Cuando venía visita siempre habia jugo de tomate para ofrecer. Siempre hacia gelatina para nosotras y en las tardes se sentían las chaclas arrastrarse por los pasillos. Nos vigilaba. Verificaba que estuvieramos en buenos pasos. Siempre. Crió 4 perros pero solo quiso 3. Lulú benji y Pitufa. Cuando murio, Pitufa estuvo una semana en la ventana llorando, esperando su regreso.

No siempree porté bien con ella. Uno menosprecia a los que ama cuando los tiene cerca. Cuando supe que sus días estaban contados, me propuse pasar el máximo tiempo con ella escuchándola cantar, hablar. Viendola dormir. En sus ultimos meses le daba platanitos fritos de contrabando. Los tenía prohibidos. Pero a ella ya no le sabía igual la comida. Y lo único que tenía sabor eran sus platanitos que me conseguía el novio de esa época. Era orgullosa. Fue muy dificil decirle que me perdonara por lo malcriada que fui. Pero lo compensaba abrazandola y besandola con una fuerza invisible, para que ella no supiera que intentaba impregnarme la piel con su olor. Con su aroma, con su textura.  Pasabamos las tardes ella en la mecedora de la terraza y yo estudiando a su lado. Le levantaba los pies para que descansara. Veía como se apagaba poco a poco frente a todos. Fue una mujer valiente. Nunca se quejó. Si mi abuela caía enferma, en serio que era de gravedad. Iba a misa los domingos y nos llevaba a comer helado en el vivero de la 77. Tenía su peluquero a domicilio. El tenia su propia peluquería pero una vez al mes, separaba dos horas para ir a casa a cortarle el cabello a mi abuela. 


Se quejó siempre de sus pocas canas. Le parecía indigno que una mujer tan vieja no tuviera canas. Que no demostrara su sabiduria. Yo siempre lo atribuí a nuestras raices indigenas. Ella insistía en sus canas. Cuando comenzaron a salir, fue feliz. Fue una mujer paciente. Muy paciente. Amorosa. Hermosa. Ella se fue una noche. Lluviosa y triste. La he recordado durante estos 24 años y cuando tengo un problema pienso en que me diria si viviera. Ella se fue y 24 años despues sigue presente en nuestras vidas. Hoy quise recordarla como era. Viva, alegre, orgullosa de su vida.

Soy Pamela Cruz recordando a un ser maravilloso que vivió en esta tierra. Que ha cumplido su misión por 104 años. Los 80 que vivió y los 24 en los que continúa su legado. Ella, ella se llamaba Maria y era mi abuela.


Notas sobre Maria, mi abuela

Septiembre 17 2010

tu ausencia es grande, despues de tantos anos,se siente en cada rincon, ya no de mi casa grande y tu habitacion vacia. se siente en esa parte de mi alma q quedo con el eco de tu voz y el reflejo de tu presencia en mi vida. despues de tantos anos,como te extrano abuelita querida!

Septiembre 17 2012
Había una vez una abuelita a la q nunca le cambio la cara, a la q nunca le cambiaron sus formas, a la q nunca le salieron más de diez canas, que vivió con tres niñas a las q les hacia los horneados mas deliciosos nunca jamás volvieron a probar, a las q encantaba con las historias del tío conejo q jamás se pudieron leer, solo escuchar de su voz; la misma voz a la que le fascinaba contar cuando llovía a la luz de las velas historias de fantasmas, de niños cambiados, de lloronas sin remedio, de niños con dientes, la novia abandonada y toda clase de terrores de aquellos que solo se vivieron en su pueblo. La misma voz que contaba como salió de la finca de la que era heredera, huyendo solo con una carreta y una maleta cuando los godos la amenazaron con matarlos a ella una joven viuda y sus dos pequeños hijos. Esa misma abuelita se transformaba muy eventualmente en la abuela correteadora que, con chancleta en mano, trató de educarlas como se educaba a la antigua, cuando las tiernas niñas dejaban ver su lado malcriado. Esa misma abuela era el escudo protector frente a papás q intentaban hacer lo mismo pero con correa en mano. Era la misma abuela q le tenía terror a viajar pero q las amenazaba con irse si no le hacían caso. La misma tierna abuela q cambio su libertad x hacer algo q nunca he visto en otra abuela después de ella: vivir para sus nietas. Fue el acto más desinteresado que he visto en mi vida.

20 años han pasado y tu presencia se siente en cada uno de los pasos que damos. En las historias que contamos, en las miradas que nos damos. 20 años han pasado y tus gestos pasaron por la sangre a los niños que tenemos, y las historias que contaste se vuelven a recordar en las noches de lluvia. Y tus deliciosos postres, están presentes en las manos diestras de una de ellas.

20 años y tu ausencia se siente como el primer dia.

20 añose y tu ausencia duele tanto como el primer dia.

Septiembre 17 2013

Hoy hace 21 anos partio al reino de los q nos ven y nos protegen mi amada Abuela. Increíblemente, despues de tanto tiempo tu ausencia se siente tanto o mas que esa triste madrugada del 17 de septiembre del 92 donde en medio de la lluvia te dijimos Adiós. Quedo la silla vacia, muchas canciones cantadas y tres jovenes corazones rotos. Tu vida al lado nuestro es lo q mejor le paso a mi vida. Maria  Mendoza Sanchez

Septiembre 17 2014

No puedo conciliar el sueno. 22 anos despues, cada 16 de septiembre se hace eterno e inevitable recordar las horas previas a tu muerte. Recuerdo el dia gris.caluroso, agotador. Recuerdo el examen realizado, la universidad con el furor de las fiestas mientras yo pasaba la tarde durmiendo absolutamente exhausta. Recuerdo el cansancio acumulado y la impotencia manifiesta. Recuerdo la tristeza infinita y el desenlace que se asomaba, lento, doloroso, irremediable.

Hace 22 anos a esta hora te ibas. Me duele tanto como el primer dia. Las heridas del alma, dormidas, se reabren, como el dolor de huesos que anuncia la lluvia. La lluvia que hace 22 anos caia implacable mientras tu cuerpo vacio bajaba lento, hacia aquel espacio desconocido para todos.

Con el tiempo he comprendido que te fuiste, que trascendiste, que siempre estas conmigo, que desde donde estas me ayudas, me proteges, me aconsejas.

Pero entenerlo no evita que cada 17 de septiembre, recuerde como se me partio la vida en dos, ni deje de anorar el biznieto que no conociste, ni el nieto que no adoptaste como tuyo, mi esposo. Oigo tu voz cantada, tengo en mi memoria el olor de tus comidas y del odioso cafe que me despertaba de manana. Veo tus ojos, tu aroma y sobre todo la bondad en tus palabras, en tus gestos y sobre todo en tus acciones llenas de amor.

Soy Pamela Cruz escribiendo en honor al ser mas desinteresado que Dios me dio sobee la tierra, mi abuela. Los que la conocieron, fueron honrados con su amistad y sus jugos de tomate, sus geltinas y sus horneados. Fueron honrados con su amabilidad sin fin y sus ojos tristones que anoraban la vida del campo ycontaban los terribles sucesos de la violencia vivida en un pasado muy lejano.

miércoles, 31 de agosto de 2016

Fe

Hace como 15 años tuve un problema con un vuelo mientras viajaba con mi amiga embarazada. El vuelo estaba sobrevendido (bastante usual con Avianca) y la posibilidad de quedarnos era de un 90%. El escandalo de mi amiga fue una cosa épica. Finalmente, lograron ubicarnos en el vuelo porque algunos voluntarios se quedaron para que la embarazada y su amiga pudieran subir. "Y si este vuelo esta destinado a caerse?" Me pregunte en silencio. Y si el destino tenía programado que nos quedáramos y nosotras lo alteramos por majaderas? Fue el segundo peor viaje de mi vida.
El tercero fue hoy y corrió con el patrocinio de unos caprichosos cambios de sala, una falla técnica en pleno carretaje y un par de pasajeros histéricos que retrasaron un vuelo 4 horas. El recuerdo de aquella vez luchando por conseguir un puesto me recordó que uno esta en el lugar,  el dia y la hora que le corresponden y que lo importante es la fe. La fe de que después de un dia bastante pesado, llegaré a mi hogar.

domingo, 28 de agosto de 2016

Censura

Estuve el pasado fin de semana en Bogotá por cuestiones de trabajo. Fue un corto pero sustancioso viaje. Pese a ello siempre es una tortura mi paso por las salas de embarque. Inevitablemente termino entrando a una librería. Para quienes no me conocen, la librería produce en mí un efecto de excitación y salivación similar al del adicto cuando tiene enfrente una droga. Es inevitable entrar mientras luchó contra el síndrome de abstinencia de compra literaria. El olor a libro me remonta a mis días de infancia, cuando mi madre nos paseaba por el centro y terminábamos en la Librería Nacional con un montón de libros y una malteada como postre del día.

Mientras fantaseaba con los libros que podría comprar si terminara todo lo que aún me falta por leer en casa, encontré dos ejemplares en la sección de los mas vendidos: "Mi lucha" de Adolf Hitler, escrito por él mismo y donde recopila su pensamiento. Ese libro estuvo prohibido muchas décadas hasta que finalmente vio la luz tanto en Alemania como en el resto del mundo. El otro libro, era de Popeye, "Sobreviviendo a Escobar", que además exhibe un sticker informando la quinta reimpresión del mismo. Me invadieron el asco y el repudio. El vendedor me dijo que la gente lo ha comprado mucho. Le espeté un seco "hay libros que no deberían venderse en una librería". Y luego, segundos después, rectifiqué mis palabras "Hay libros que, así se exhiban, no deberían comprarse". El señor asintió en silencio.

Recordé cuando trabajaba en la librería  y me topé con un libro negro como la noche. Un libro cuya portada aún recuerdo con miedo. Se llamaba "La biblia del diablo". Su portada le hacía justicia al título. Endiabladamente escabrosa y tenebrosa, ni siquiera lo abrí. Le pregunté al librero de donde había salido semejante esperpento y le ordené regresarlo al día siguiente al proveedor. Me justifiqué diciéndoles que una librería como la nuestra no debía vender semejante ejemplar. Confieso que me dio miedo. Sentí temor que alguien lo leyera.

El que compra para un negocio, tiene la libertad de seleccionar el tipo de mercancía que le vende a sus clientes. Puede decidir qué tener y que no, de acuerdo con el perfil de su público. No pasa igual con los libreros. Sus librerías son centros de acopio de información, de versiones, de historias que gustan y de otras que asustan.Tienen el poder de sesgar su portafolio según el tipo de cliente que tienen, tienen también el deber moral e implícito de exhibir conocimiento. Aunque al hacerlo se convierta en un peligro potencial para el lector. Con sólo de recordar el desenlace del guardián de la Biblioteca en el libro de Eco "El Nombre de la Rosa",tengo una idea de lo que para uno podría llegar a ser demoníaco. La sola posibilidad de divulgar los pensamientos de un filósofo fue suficiente justificación para el monje que mató, para guardar el secreto. 

Jamás leería un libro que me recuerde o reivindique a los monstruos que amargaron mi adolescencia en los 80's. Jamás leería un libro donde Hitler prácticamente justifica las atrocidades cometidas en los 40's. Jamás podría siquiera tener en mis manos un libro del demonio. Mi cuerpo sería incapaz de sostenerlos. Sin embargo, estoy convencida que a cada individuo le asiste el libre albedrío de leer lo que su cuerpo y su mente aguanten y que la censura a los contenidos provenga del interior de cada uno. De la batalla interna que sostengan, la mente, el espíritu y su individual sistema de valores. 

Soy Pamela Cruz escribiendo hoy 28 de agosto sobre un tema un poco extraño para las noticias de estos días: La censura. Esa que puede llegar a estar en los sitios mas insospechados, como la Internet, las bibliotecas, los noticieros, los magazines o inclusive en sitios más humildes como en una librería. 

domingo, 31 de julio de 2016

Los Conquistadores

Uno de mis placeres más mundanos es viajar. Alimentada por historias de infancia y libros leídos, me hice la promesa de viajar una vez al año al exterior y cada que pueda al interior para darme ese pequeño lujo de conocer lo que pueda del mundo. Trabajar en lo que hago alimenta el sueño de otros para lograr lo que yo más amo: viajar. 

Hace un mes llegamos de vacaciones en México. Nos tomamos 10 días que resultaron siendo escasos cuando comparo los sitios visitados versus la vasta extensión mexicana. Caminar por sus calles es un placer absoluto. Los parques, sus avenidas, su arquitectura, su gente. Oler y comer en las esquinas sus exquisitos platos. Pero sobre todo admirar sus ciudades. Las de ahora. Las de antes. Pirámides como las de Teotihuacan, Cholula, el Complejo Arqueologico de Cantona, los canales de Xochimilco son sencillamente asombrosos. Recorrer barrios como Coyoacán, Polanco, el Centro Histórico de D.F., con construcciones de siglos de antigüedad le dan contexto a la historia. Sentir la preocupación por restaurar joyas del pasado y hacerlas útiles en el presente, es esperanzador con una generación a la que el pasado le es indiferente. Caminar por sus calles y encontrar oculta tras la maleza una iglesia de 400 años, es un tesoro de pirata. Ingresar al Palacio Nacional de las Artes y contemplar casi 100 años de lujo desbordante, con mármol de piso a techo, dan cuenta del esplendor y del gusto con el vivían las generaciones pasadas. La vida mexicana -cargada de simbolismos- gira alrededor de su gastronomía, una de las más maravillosas que he conocido y que transpiran pasado, presente y futuro. El libro "Colombia donde el verde es de todos los colores", bien  explica una de las diferencias entre nosotros y los mexicanos: ellos tienen claro quienes son y de donde vienen. Tienen consciencia de su pasado diverso. Por eso, lo que conocemos como "mexicano" a secas, adquiere su propia diversidad cuando, con paciencia y tiempo, nos comenzamos a entender las diferencias que no nota el extranjero pero si reconoce el nacional.

Ayer, mientras le daba un recorrido a un visitante australiano, recordaba, una de nuestras tardes en Puebla. Habíamos almorzado en el mercado público. En plena plaza, sentados en una silla y una mesa enormes, sin lujo ni pretensiones nos comimos la mejor Cemita de Puebla. Visitamos el Monumento de los caídos. Una extensión de tierra enorme con museo, lago, mirador, las infaltables letras de la ciudad, patos, bancas para sentarse, y sobre todo, verde, mucho verde. Terminamos el día haciendo fila para comer churros con chocolate caliente y rematamos en visita guiada al palacio municipal, donde despacha el presidente de gobierno, es decir, el alcalde y el consejo de Puebla. Mi tour barranquillero comenzó tipo 3:30 p.m. por la Avenida del Rio, donde aprecié cómo 3 años después de su inauguración, la única novedad es el brillante aviso de la nueva alcaldía, y al contrario de lo que esperaba, el óxido amenaza la integridad de postes, luminarias y miradores. Los muelles están podridos, en precarias condiciones sin aviso que advirtiera a quienes buscaban descansar a la orilla. Los locales construidos siguen cerrados, sin operación comercial. No pudimos caminar por el centro. Qué le iba a mostrar si en la calle no se puede caminar y los edificios antiguos, esos que contarían una historia, se resignan a su suerte en medio de capas de avisos viejos, apocando el esplendor de su pasado memorable. Íbamos a llevarlo a la plaza de San Nicolás pero el hombre no era de iglesias y, sin árboles, realmente es infernal pasear a las 4 p.m. Pasamos por el Viejo Prado y mi visitante preguntaba por qué casas tan hermosas están tan deterioradas. Le conté que nuestro Teatro, orgullo en los 80's estará cerrado por alguna razón. Me dio vergüenza contar que el coliseo cubierto fue demolido pues ya le había anunciado que también lo será el estadio de béisbol y el de fútbol. Desvié su atención a los árboles y a la historia de la planificación inteligente de Parrish hace 100 años. A la belleza del bulevar decorado con sus árboles. (Obvié los que se están muriendo por la pajarita). Seguíamos tratando de mostrar la ciudad, pero encontramos edificios. Lo llevamos a merendar y luego a comer helado. Me resistí a sucumbir frente a la simplista tentación de bajar en un centro comercial y abandonarnos al comercio. El vive en un mundo donde la gente los sábados sale y disfruta de sus espacios públicos. Yo quería que viera los nuestros. No pude.  

Esta semana la tendencia en redes y conversaciones ha sido el Museo Romántico. Embargado por falta de pago (no es la primera vez que le pasa según una nota de El Heraldo en el 2013), el sueño de quien considero el último amante fiel de esta ciudad, se le ha convertido en una cruel pesadilla. Su titánica labor de construir una memoria histórica diferente que integre cultura y tradición, tiene de romántico el pasado de una ciudad que era amada y respetada por sus habitantes. Una ciudad orgullosa que se levantaba pese a las injusticias centralistas. Una ciudad que respetaba y planificaba para generaciones futuras, en la búsqueda de permanencia y memoria. Pues bien. El museo solo alberga un pasado ingenuo y romántico que no existe hoy. Como los objetos valiosos que poco a poco van perdiendo su brillo, así se encuentra la ciudad. El museo es como esa cajita de recuerdos que solo tienen valor para quien los atesora con cariño, para quien tiene recuerdos gratos al contemplarlos. Lo corroboro hoy mientras anuncian con el mayor orgullo La Nueva Mega Obra de esta administración: la construcción sobre los terrenos de El batallón. 
El espacio verde del sur, a la orilla del rio,
en menos de lo pensado sera La Alcaldía en La loma

Modificando el POT, lo que se hubiera constituido como  "Mayor Pulmón de la ciudad" con 51 hectáreas, ahora es solo una burla a los gritos desesperados de los que exigimos menos cemento y mas verde que el miserable medio metro cuadrado de espacio verde por persona al que nos tienen condenados los políticos y con el que pretenden conformarnos. Nos "arreglaron" los parques para hacernos creer que vivimos un sueño de #CapitalDeVida y una #BarranquillaFlorece Y mientras nos embolatan con migajas, nos arrebatan la memoria y de paso, la ciudad. Vil, descarada y arrogantemente, están destruyendo sobre lo construido imponiendo su huella de prepotencia y poder. Nos arrebatan tierras comunitarias para imponernos edificios repletos de gente, en el cínico nombre del "Progreso" y con la miserable excusa de crear vías de descongestión, mientras hace años tenian arregladas las tierras para edificios que haran mas dificil la ejecucion de los servicios públicos en esa zona de la ciudad.

Soy Pamela Cruz, escribiendo hoy 31 de julio del 2016, después descubrir que las "34 hectáreas" que se destinaran para nuestro nuevo "Central Park Criollo" y que equivalen a la ridícula cifra de 340.000 metros cuadrados, o mejor 0,34 km2 mientras el Central Park de NYC, el de verdad, verdad tiene la bicoca de 3,200,000 mt2, que equivalen a 3,41 km2 o mejor 340.000 hectáreas. Aún no sé si reir o llorar cada vez que descubro en pleno siglo 21 nos siguen regalando míseros espejitos de latón mientras "los conquistadores" se siguen robando nuestro oro.

En pleno centro de la isla se aprecian las 340 hectareas
de Central Park


PD: Sera que algún día nosotros ciudadanos de esta tierra seremos capaces de defender lo poco que aún nos dejan.?

domingo, 10 de julio de 2016

Hágase Rico y ArmoTodo

Cuando era pequeña, dos juegos mantenían ocupadas nuestras tardes de vacaciones: Hagase Rico y ArmaTodo. En el uno jugábamos con dinero de mentiras y ganaba quien se apoderara de todas las propiedades y quebrara al resto.  Podíamos amanecer sin que ninguna se diera por vencida, sostenidas por nuestro orgullo y con algunos billeticos de juguete en el bolsillo. El otro, bueno, el otro era un juego de hacer casas, edificios y tumbar y de nuevo armar. Recuerdo la sensación de poder que me invadía cuando desarmaba y armaba otro nuevo edificio. Por un lado, era tristeza por el tiempo gastado. Por el otro, era esa sensación todopoderosa de tener el control absoluto de hacer y deshacer a mi antojo.
La noticia de la semana, la que se anuncia con bombos y platillos, es que el Distrito reconstruirá la carrera 38. Para generaciones anteriores a la de los 90's, esta calle conectaba entre otros, a los amantes que viajaban desde la 38 con 80 hasta la vía Juan Mina, con sus nidos de amor por horas. Yo la recuerdo, además, porque en el colegio, mis sesiones de Vigías de la salud se llevaban a cabo en el humildisímo barrio La Pradera y el bus escolar nos dejaba y nos recogía justo en la entrada del famoso Maracaná.
Hace poco más de 10 años, un grupo de empresas constructoras, compraron terrenos prohibidos para la construcción a sabiendas de la situación inestable geológicamente hablando de los suelos, documentada por el  urbanizador, Karl C Parrish, y construyeron el sueño de muchas personas que pusieron los ahorros de su vida en una nueva vivienda. Las mismas personas vieron cómo se desmoronaban sus sueños con ellos dentro y tuvieron que salir, literalmente, corriendo mientras sus casas se caían como castillo de naipes. La tierra señores, la tierra, tarde o temprano se cobra la agresión. Esos urbanizadores vendieron sus construcciones, se volvieron más ricos con ellas y cuando las demandas llegaron, el Distrito, osea nosotros, pagamos por su irresponsable acción. Ahora, indemnizados los habitantes, destruida una calle -daño colateral del desastre, se anuncia con bombos y platillos, la reconstrucción de la misma con dineros de los impuestos. De esos que servirían para terminar las calles y carreras de los barrios pobrísimos que inundan la circunvalar. Yo siento asco, vergüenza y una tremenda impotencia. Uno de esos constructores que ahora estará al frente de la orgullosa reconstrucción, como una hazaña más de su administración, creo que siente lo que yo sentía cuando jugaba ArmoTodo: una tremenda sensación de poder.
Soy Pamela Cruz escribiendo hoy 16 de julio 2016 tratando de eliminar con mis letras ese terrible mal sabor en la boca que siento cuando mis ojos no dan crédito a lo que leen, y nadie se da cuenta aún que nos tratan como Echeverri, el siempre estafado personaje de Sábados Felices.

domingo, 3 de julio de 2016

Acuerdos de Paz: Leer, Nos urge leer.

Hace 4 días llegué de México, un país al que le debo una nota sobre los sentimientos que genera en mi interior. En el aeropuerto, mientras esperábamos para abordar, en una época donde todos se enconchan en sus Smartphones y olvidan al resto del mundo, yo sin batería y una señora sin celular, comenzamos a matar el tiempo hablándonos mutuamente, como en las épocas de antes. Ella es ecuatoriana y vive hace 28 años en México. Le encanta el país, pero está pensando en volver a Ecuador, después de 28 años!  Le pregunté por qué: "Porque la situación en México es terrible. Para paseo está padrísimo”, - y creo que lo dijo porque vio mi ojos desorbitados- “pero para vivir esto se va a poner terrible. " - Y cómo lo sabe? le pregunté.  La humilde mujer, con un acento mezclado entre mexicano y ecuatoriano, que sonaba como si cantara cuando hablaba, sentenció: "Por el Brexit". “Y cómo afectará eso a México?", insistí, a ver si me explicaba algo que ni yo entiendo aún. "Uuuu, señorita, no sé!  Pero las noticias dicen que esto acabara con la economía de México así que mejor me voy antes que esto comience. No quiero me que coja aquí sino en mi tierra, con mi familia". Me quede muy muda. "Llamada para abordar", aviso el auxiliar de Copa. Respiré aliviada. Fin de la conversación. 

El 23 de junio, salí a cenar con uno de mis amigos mexicanos y su esposa. Nada más entrar al coche, nos felicitó porque éramos noticia mundial. Se firmaron los acuerdos en La Habana. Ay Dios! En mi casa somos 3: Dos en contra de los acuerdos y adivinen quien a favor. A fin de cuentas, yo tengo un hijo adolescente, soy madre y mis abuelos vivieron toda su vida con la sombra de la Violencia de Tirofijo. Todo el camino, mi esposo y mi hijo despotricaron de lo firmado y yo, digna y estoica, aguanté hasta llegar al restaurante. "En todo caso," -dijo mi amigo, asombrado porque hubiera gente en contra de la firma de los acuerdos- "siempre será mejor una paz firmada que una guerra activa."

Las negociaciones de La Habana han dividido a este país desde hace 4 años pero este país, ha estado dividido por conflictos desde la independencia: Los que nunca la quisieron como se dio y los que no querían que se diera. Los que no querían la república como se dio y los que defendían lo que crearon. Los liberales, los conservadores. Los del Centro Democrático, los traidores. Y así hasta nuestros días. Los chat de amigos, son territorio peligroso en este tema. La gente entra y sale de los mismos porque se siente agredida y en serio que a veces agreden con las posturas y argumentos simplistas, y el fanatismo con el que los defienden. Yo misma me he sentido tentada a salir algunos de mis grupos cuando se toca el tema y he preferido eliminar la conversación entera sin leerla antes de polemizar sobre el tema. Las discusiones de política, sexo y religión terminan dividiendo y creando distancias. Entiendo que las posturas son inherentes a nuestra condición humana y mientras exista una discusión elevada, que trascienda los argumentos tontos y básicos que nos inyectan los medios y los demagogos para tratar de sembrar el miedo y el terror, vía ejemplos que no aplican en nuestro entorno, todo se vale. Mientras mi interlocutor sea una persona leída, que me ofrezca argumentos de historia latinoamericana, de historia, documentada de los últimos 150 años, que hable de otros conflictos resueltos y no resueltos en el mundo, o que me muestre con cifras y no rumores, de los que quieren poder usando el miedo, aceptaré esa disertación, conversación o discusión civilizádamente. Es más, si en medio de la campaña de referendo para la paz, me muestran con datos concretos donde demuestren que seguir matando jóvenes de un bando u otro y lidiando con la corrupción más salvaje del mundo, es mejor que construir país sin excusas de guerrilla, hasta consideraría mi posición. Pero para ello, tenemos que hacer algo más que replicar como loros, lo que los demás lanzan al viento a ver quién lo toma y lo multiplica, aterrado.

TENEMOS QUE LEER, dejar la pereza o la rabia o lo que nos impide hacerlo y leer. Leer lo que dice el periódico, leer sobre conflictos en el mundo, y como terminaron. Leer sobre los heridos y los muertos de la guerra. Leer sobre las consecuencias de la paz. Sobre los resultados de los acuerdos en todo el mundo y en los tiempos pasados. Leer. Leer. Leer. Solo eso nos da la capacidad de discernir y tener una opinión propia y no copiada de otros que aprovechan nuestra ignorancia para implantar pensamientos “granada”, que explotan cuando los repetimos y los enterramos en las cabezas de otros sin la responsabilidad de ponerlos a pensar. Leamos y tendremos todos los argumentos intelectuales para sostener nuestra posición, sea a favor o en contra.

Soy Pamela Cruz, escribiendo hoy 3 de julio/2016 cuando me dispongo a iniciar el análisis y revisión juiciosa del portal http://equipopazgobierno.presidencia.gov.co/Paginas/equipo-paz-gobierno.aspx  de la mesa de negociación de La Habana.  Lectura pesada. Pero es la única forma... no hay otra. Es la única forma que tengo para poder comprender este futuro que nos alcanza.

PD: Parece que no soy la única a la que le preocupa una campaña desinformada. opinion/articulo/maria-jimena-duzan-plebiscito-por-la-paz-que-pasa-si-se-pierde


viernes, 10 de junio de 2016

Cliente VIP en una empresa de tercera

Abril fue un negro mes para mis para mis finanzas. 4 electrodomésticos dañados por fluctuaciones de luz hicieron que mi cariño hacia la empresa de energia fuera inversamente proporcional al aumento de la factura de la misma. Aún no encuentro explicación al aumento del consumo con 4 aparatos fuera de circulación:  lavadora, aire acondicionado, computador, extractor. 4 técnicos revisaron la situación. El del AA, el de la lavadora-extractor, el del computador y el electricista. Los 3 primeros fueron tajantes: daños en las tarjetas de los equipos por sobrevoltaje de corriente. En la era del "dañe y reemplace" u "obsolescencia programada" el panorama de reemplazo fue desolador. De 4 solo 1 tuvo arreglo y su repuesto llegó despues de 1 mes de buscarlo literalmente, en el mundo de la internet.
Con uno reparado, dos dañados y un AA nuevo (inverter para dizque contribuir con el ahorro que jamás veo en mi factura), comenzó un nuevo mes aparentemente normal. Debidamente protegidos contra cambios de voltaje, los inteligentes reguladores instalados en los electro no solo avisan los cambios de voltajes anormales, cortan el paso de la corriente y el aparato se apaga. Hasta que no se normaliza el flujo, no prende. Pues bien, en mi apartamento hace 8 dias completos que el aire inverter se apaga por sobre voltaje durante toda la noche y solo se restaura el paso a las 8 de la manana. "El problema no es que se quemen los aparatos", me dijo una amiga. "El problema es que se incendie la casa por recalentamiento de los equipos y cables que todo el tiempo se someten a sobrecalentamiento". Pánico. Eso se apoderó de mi cuando supe que una de mis vecinas habia sufrido un conato de incendio esta semana. Un abanico recalentado en mitad de la noche. Lo apagaron ellos mismos, de milagro.
La mision imposible que decidí aceptar desde el jueves que mi electricista confirmo que mi apartamento no tiene problemas, ha sido comunicarme con la línea de emergencias 115, que la cuenta de @electricaribe, muy diligentemente  me envió despues de un twitt con copia a Superservicios. Una operadora cachaca contestó despues de 15 minutos de espera. Despues de tomar mi caso y esperar en medio de la noche que alguien llegara, nada pasó. Nuevamente llamé y esta vez dí el numero del edificio, porque el asunto del incendio prendió todas mis alarmas.  "Usted es cliente vip y ya la transfiero al area encargada porque yo estoy en Bogota y su servicio es en Barranquilla". Y me colgaron. Y asi durante 4 llamadas, hasta que el partido, el desespero, la frustración y la rabia me vencieron. Solo por esta vez.
Las empresas de servicio público deben ser algo como el aire que respiramos. Existe, es indispensable, lo necesito pero no debe ser el protagonista de mi vida. No debería saber de ellas salvo circunstancias especiales. Durante muchos años el fantasma de los sobrevoltajes, los apagones, fallas, estuvieron ausentes de mi vida.  Barranquilla, se supone, va camino a ser potencia regional y polo de desarrollo ejemplo de la nación. En la piramide de necesidades basicas, el agua, el aseo, la luz, el gas, en fin los servicios públicos, deberían ser un asunto superado. El que nuestras noches estén cargadas de fallas de luz, sin respuestas detrás de una linea que no responde, dan fe del retroceso que enfrentamos en una ciudad secuestrada por una empresa que paga enormes sumas en propaganda inútil para mejorar una imagen que no tiene cómo mejorar por su pobrísimo servicio.
Mientras duermo en la sala, con un ojo abierto y la nariz afinada, pensando en la compra imperiosa de un extintor y detectores de humo e intento que, como cliente VIP de una empresa de tercera alguien me conteste, recuerdo la amenaza ligera que escupió el entonces candidato a la alcaldía donde pregonaba "su amenaza" sobre una indómita empresa que nos doblega con sus altas tarifas y su pésimo servicio.
Soy Pamela Cruz escribiendo hoy 12 de junio en medio de la noche esperando que un dia cercano alguien al otro lado de la linea 115 me responda y solucione, para volver a tener noches seguras en mi propia casa.

miércoles, 25 de mayo de 2016

Los segundos veintidós: El tiempo pasa...

A una hora de cumplir los 44 años o los segundos veintidós, como me dijo en tono de consuelo mi compañera de trabajo, que podría ser mi hija si me hubiera embarazado de 17 años, el insomnio me atrapa en esta noche calurosa, de una ciudad cada vez mas estéril en vegetación, angustiada por el paso del medidor de luz que contabiliza, implacable e insensible, el aire que hace soportable esta noche húmeda; el medidor del tirano que exige austeridad en épocas donde la urbe parece mas "una puerta de horno" que "La Puerta de Oro". Nos merecemos el calor que aguantamos, pienso, por no sembrar árboles o peor aún, por dejar morir los que se sembraron hace más de 30 años.


22 años después de mis primeros 22 tengo lentes, de esos que aclaran la vista tanto de lejos como de cerca. Muchas veces prefiero no ponérmelos, porque la línea invisible y burlona que separa ver de lejos y ver de cerca es todo un fastidio. Nunca puedo dar con el ángulo para no marearme y termino caminando como si el piso se me viniera, literalmente, encima. La vida en los segundos veintidós, se parece a mis lentes para lejos y cerca. Hay que tener las dos vistas: ver el futuro pero sin perder de vista la intensidad con la que se puede ver lo que tienes en la punta de tu nariz. Si solo tienes para ver de lejos, lo que tengas cerca se desdibuja, mientras te sientes satisfecho por ver más allá, justo donde nadie ve. Sin embargo, ver siempre de lejos, a veces te priva de apreciar justo lo que tienes cerca, la belleza de los detalles por ver el paisaje lejano.

En mis segundos veintidós, quiero comenzar a usar correctamente mis gafas de leer. Mi vanidad me ha impedido disfrutarlas, pero se aprende tanto al depender de un humilde vidrio aumentado: Aprendo sobre mi propia vulnerabilidad, sobre la fragilidad de un cuerpo que no permanece intacto en el tiempo, así lo rellene de cremas y lo torture con dietas. Aprendo sobre el cambio, sobre el amor propio, y sobre la aceptación, la propia, no la ajena. Aprendo sobre la gloria, no aquella que cambia el mundo, sino esa que cambia mi mundo. 

"El tiempo pasa, quieras o no quieras, y como pasa es mejor hacer que quedar esperando". Así me dijo una madre hace mas de 6 meses, cuando buscaba curso para su hijo. El tiempo sigue pasando, para mi fortuna conmigo dentro. Comienza el segundo tiempo. Alisto los zapatos de caminar y los lentes para ver de cerca, para vivir de cerca.

Soy Pamela Cruz escribiendo hoy 26 de mayo 2016, el día que por segundo año consecutivo no hay canción para estrenar, porque el que cumplía como yo y me daba serenata se murió y con él, el detalle de estrenar cada año una melodía. Escribo con la convicción de ser y hacer con consciencia, porque el tiempo, Ay Dios! el tiempo, no se detiene.

Mi serenata de mi para mi: Esta bellisima canción de super héroe de la música Carlos Goñi
"EL TIEMPO PASA."

domingo, 8 de mayo de 2016

Propiedad privada

Recién casada, mi segundo o tercer acto luego de llegar de la luna de miel fue imprimir mis tarjetas de presentación con mi nuevo apellido de casada:

Pamela Cruz de Escobar
Coordinadora de Centro de servicio Black&Decker
Intex Sociedad Limitada

Ya era casada y quería tener el estatus de mi suegra Karime Morad de Escobar y mi madre Leonor de Cruz. Mi esposo estaba orgulloso de ver su apellido al lado de mi nombre. El apellido duró acompañando mi nombre lo que duraron las tarjetas. No me considero feminista recalcitrante, pero muchas mujeres lucharon antes de mi, para eliminar el "De" obligatorio en las cédulas, para que yo me lo volviera a poner.  Con el perdón de mi esposo, llegué a la conclusión de que yo era Pamela Cruz Herran, hija de mis papás y casada con mi esposo, pero no le pertenecía a nadie, solo a mi, aunque a veces me perdiera hasta de mi misma.  Así que una vez terminadas las tarjetas, volví a ser Pamela Cruz Herran, así no más.

Hace unos dias ví un vídeo, a propósito del día de la madre,  donde un presentador le juega una mala pasada a unos niños que, inconformes con sus mamás regañonas y exigentes, quieren una que sea la mamá perfecta. Que los deje comer dulces, que no regañe, que juegue con ellos todo el dia, etc. Cuando el presentador les entrega a su mamá mejorada (y que en realidad es otra mujer),  los niños estallan en llanto. En medio de lágrimas le piden al hombre que les devuelva a su mamá. "SOLO QUIERO LA MIA", suplican. Y el presentador se las devuelve. Más allá de la tortura a la que fueron sometidos los niños y reflexionando sobre el tema, llegué a la conclusión que yo, que no dejé ponerme el "De" dizque para no ser de nadie, terminé marcada de por vida, y por voluntad propia que es mejor. Al tener a mi hijo, me entregué como su propiedad privada. Cuando llamo al colegio o a otros papás mi nombre ya no es Pamela Cruz Herrán, ni siquiera de Escobar. Mi introducción completa es Pamela Cruz, la mamá de Emanuel Escobar. Siempre es igual. Si no lo hago, sencillamente mi llamada carece de sentido.

Mi hijo y yo peleamos porque soy estricta, porque soy la más aburrida, porque no lo dejo salir a todo, porque soy la única que aún no lo deja manejar, porque le decomiso el ipad, el celu o el xbox, cuando incumple con algo. Porque lo mando a la Alianza cada sábado cuando quisiera  seguir durmiendo o porque se acuesta a la hora que es y no a la que quiere. Peleamos por todo, pero a la que despierta de madrugada porque tiene fiebre, indigestión, o una pesadilla es a mi. La que le busca a toda velocidad la corbata olvidada en plena misa o lo recoge a la carrera para el partido es quien escribe. Mi años de Scout sirvieron para estar siempre lista, para servir de lo que sea: De confidente, de pañuelo, de enfermera, de psicóloga. Me entregué voluntariamente a ser su propiedad privada. Fue el acto de sumisión más grande que una mujer comete. Y del que no existe forma de liberación porque la subyugación fue, es y seguirá siendo voluntaria.

Soy Pamela Cruz escribiendo hoy Dia de Madres 8 de mayo 2016, sobre los actos de sumisión voluntarios cometidos en nombre del amor, entre ellos ser propiedad privada de nuestros hijos.
PD: Feliz Dia a las madres. A todas, incluyendo a la mia, las que en un acto de libertad absoluta decidieron ser madres y luego quedaron sumisas bajo los encantos de sus hijos, para siempre.

sábado, 30 de abril de 2016

Como visitar a los abuelos

Cuando estaba en la universidad, durante un semestre compartí con una compañera de familia árabe. Me encantaba ir a su casa porque lo que para mí eran banquetes para ella un almuerzo normal. Un sábado cualquiera estábamos reunidas desde temprano y me dijo que almorzaríamos en casa de sus abuelos. Llegamos a la casa, cerca al Barranquilla Plaza, que ahora ocupa ProBarranquilla. Entramos y mi asombro perduró hasta la hora del postre. Me sentí arrastrada en el túnel del tiempo, aterrizando a los años 60 y 70's. Un caserón cuyo patio llegaba a la carrera siguiente. Espacios bien pensados, techos altísimos, una piscina mantenida pero no usada y un montón de salas, un bar con butacas abullonadas, que recuerdo haber visto en las películas de la época. Todo el mobiliario se encuentra nuevamente de moda en esta década. Sencillamente la casa y sus habitantes quedaron congelados en el tiempo, y fue una sensación exquisita. Se sentía el amor por cada espacio y las atenciones de la abuela y del personal de servicio, fueron inmejorables. Siempre quise volver pero nunca pude. Mi compañera y yo tomamos rumbos distintos y ahora, bueno, ahora imagino que el nuevo propietario, ya lo tiene convertido en oficinas. 

Hace una semana me entró en el cuerpo esa ansiedad por ir a la piscina de El Prado. Desde pequeña iba con mis hermanas en un plan que ellos tenían y que consistía en pagar por nadar. Fue muy práctica mi madre en mantenernos ocupadas con planes raros. Pues bien. No se si a una con 43 años a punto de cumplir 44 le da por recordar cosas viejas, pero se me metió en la cabeza volver, y mi esposo, como siempre, me siguió la corriente. Lo había visitado hace un año averiguando sobre un salón para un evento, pero no pasé del salón. Y podría tener unos 30 que no me metía en la piscina, ni recorría los patios, esos que me hacían sentir segura cuando entraba con mis hermanas.  Volver fue entrar al túnel del tiempo, con los empleados incluidos. Entrar a ese jardín lleno de las palmeras que detesto, bien mantenidas, rodeadas de jardines absolutamente verdes, decorado con la mejor piscina que tiene la ciudad, en palabras de un amigo que cuando viene a Barranquilla, se aloja en El Prado por su piscina, fue sencillamente maravilloso. Fue como entrar a un jardín secreto, oculto entre la maleza urbana. El manejo del hotel ha sido adjudicado a la cadena Marriot. Por descontado se da que la inversión será enorme. Cuando se detallan los pasillos, la piscina, el mobiliario, un nudo de tristeza se alborota en la garganta. Es que todo se ve tan viejo. Pero lo que mas conmueve, es ver la vejez, los embates del tiempo y ese maltrato que no merecían ni la vieja mole ni el personal fiel que se niega a dejarse derrotar por la incertidumbre, llevados con una dignidad impresionante. 

Cualquier grieta o humedad que se asoma indiscreta en las paredes, o ese viejo esplendor de las cosas que no han sido renovadas a tiempo, y que puede hacerte sentir incómodo, es perdonado inmediatamente te recibe uno de los meseros, botones o el señor de las toallas. Te atienden con la alegría de recibir nuevamente aquellos huéspedes que no volvieron. Perdoné los detalles que le pueden quitar puntas a las estrellas tan arduamente luchadas, porque los reemplaza una atención inmejorable. El que menos tiempo lleva de los que pude conocer, tiene 2 años. Es un reincidente que se marchó, pero como hijo pródigo volvió a casa. Les pregunté como se sentían con el nuevo operador; la incertidumbre los acecha pero la disimulan con esperanza. "No nos han dicho nada, señora. La nueva administración está evaluando todas las obras que le tienen por delante." Nuestro día nos daba derecho al turco y al sauna. Jamás los visite antes, porque tenía menos de 18 y no dejaban pasar niños a esa área así que aproveche y me adentré al pasado de un esplendor perdido. Espero que vuelvan a abrir el Spa, por las instalaciones de lo que queda del viejo, era un tremendo lugar. Me pidieron perdón por las incomodidades que podría encontrar, y me alimentan la esperanza, o quizá a ellos mismos, que pronto podremos disfrutar de un servicio completo. 

Recorrer sus jardines, recordar aquellas sillas de merecedora donde nos mecíamos mis hermanas y yo en la niñez, nadar la piscina siempre pegada al borde porque los 2 metros y luego los 3 de profundidad siempre me aterraron, fue sencillamente, como volver a casa de los abuelos de mi amiga. A esa casa que conocí, donde se perdonaba cualquier objeto a punto de romperse porque la belleza del mismo y el amor con que era cuidado, superaban el paso del tiempo.

Soy Pamela Cruz escribiendo hoy 30 de abril, sobre un recuerdo de niñez, hoy día del niño. Escribo hoy invitando a quien alguna vez en su vida tuvo la fortuna de pasar una tarde, un día o un domingo en esa casa que guarda la memoria de la pujanza y visión barranquillera, a visitarla con la delicadeza, con la sencillez y con la indulgencia con la se perdona lo malo y se ama lo bueno. Deseo que abra la pizzeria, que abra la peluquería, que haya helados los domingos en las tardes, que los viejos tomen en la terraza una cerveza y que cualquiera se pueda sentar en las bancas mientras se mira allá, al cielo. Un jardín secreto... envuelto en la maleza urbana... eso es El Hotel El Prado.

Los domingos, cuando la pizzería abría o antes de abrir la gente llegaba y se comía un helado. Y luego pasaba a comerse la mejor pizza de la ciudad


Para mí el paisajismo de palmeras en este hotel has sido el mejor logrado en toda la ciudad. 

El restaurante de la piscina. Una vista privilegiada. 


Cuando se camina rapido no se ven los detalles de las paredes

Quizá la piscina mas bella de la ciudad. 

Piso Pompeya en todos sus pasillo. Viejitos pero muy cuidados